Especies autóctonas del Parque Nacional Talampaya

Los animales forman parte de la vida social y cultural de cualquier comunidad. Muchos de ellos sufren los flagelos del hombre y la falta de conciencia respecto a ellos. Hay muchas especies en peligro de extinción y que lamentablemente desaparecen por la contaminación provocada por el hombre y su entorno.

El Parque Nacional Talampaya es un buen ejemplo que representa todo lo contrario, está ubicado en La Rioja Argentina y se creó con un principal objetivo: la preservación de especies autóctonas, además cuenta con magnificas esculturas de dinosaurios que habitaron la región miles de años atrás. No es solo un parque para jugar, aprender y divertirse; es toda una institución dedicada a la preservación y cuidado de las especies propias del lugar que conviven con el peligro de extinción y que guarda celosamente vestigios de siglos pasados.

Hasta el momento se han documentado 120 diferentes especies que habitan la zona, de las cuales 16 pertenecen a variados tipos de insectos. El parque es conocido principalmente por  su reserva de guanacos y vicuñas entre las más destacadas. Además se encuentra al halcón peregrino y el cóndor andino en cuanto de  aves se trata.De cielo a la tierra podemos observar al chinchillón, cachalote pardo, el zorro gris y la chuña de patas negras. Muchos de estos animales no son visibles fácilmente ya que se esconden ante la presencia de humana o habitan entre rocas o arbustos.

Constituyen un gran e interesante atractivo turístico ya que allí se pueden apreciar animales que no son comunes a la vista cotidiana y las excelentes replicas de los dinosaurios que habitaron esas tierras. El bioma en el cual habitan los animales que hoy  se protegen   es el del monte, la temperatura del lugar se hace sentir y en verano llega fácilmente a los 50º mientras que en invierno a -7ºC.

Un dato no menor es que las especies autóctonas del Parque Nacional de Talampaya se mantienen y preservan aún gracias al cuidado y dedicación de esta reserva que fue declarada entre los siete Patrimonios de la Humanidad.

En cuanto a sus características geográficas se observa que está ubicado en una cuenca (accidente de la geografía propia del lugar) del periodo triasico. Las rocas que allí se encuentran datan de millones de años atrás y dan cuenta de la evolución del clima, la flora y la fauna del lugar.

Este parque es ideal para hacer actividades variadas que van desde caminatas, hasta avistaje  de animales y la distinta vegetación. Quien sea apasionado por la fotografía la fauna del lugar es muy buena toma para ser retratada, por grandes y chicos.

El Parque Nacional Talampaya tiene una extensión de más de 200.00 hectáreas. El visitante debe saber que se encuentra abierto todo el año, en Semana Santa, vacaciones de invierno y fines de semana largo aunque el cupo de visitantes se ve limitado por la cantidad de gente que llega.

Una forma diferente de hacer turismo, una forma práctica y activa de aprender más sobre un ecosistema que ofrece un paisaje increíble y especies únicas que seguramente sus ojos no han visto aún.